La fluorosis ósea es el resultado de la acumulación de fluoruro en el tejido óseo debido a la exposición prolongada a dosis elevadas, principalmente a través de la ingestión de agua contaminada. Inicialmente asintomática, puede manifestarse en la edad adulta con graves complicaciones neurológicas.En nuestro estudio de 18 pacientes, la fluorosis se diagnosticó utilizando datos epidemiológicos y radiológicos, debido a la no disponibilidad de datos biológicos. Los síntomas eran a menudo graves, pero se observó una estabilización de los signos en la mayoría de los casos. Las fuentes de exposición incluyeron el envenenamiento hidrotérmico y dos casos de envenenamiento ocupacional. La mejora de la red de distribución de agua podría contribuir a limitar la fluorosis. En todo el mundo se están realizando estudios para cartografiar las zonas endémicas y explorar las predisposiciones genéticas.Aunque los casos de fluorosis ósea están disminuyendo, nuestra comprensión de la enfermedad sigue siendo crucial, con la aparición de nuevos aspectos que despiertan el interés de los investigadores.