El vasto campo que tiene la medicina interna permite su interrelación con otras disciplinas y ser expandida tanto como la mente y el conocimiento deseen, o ser limitada por la capacidad y curiosidad del médico.
La obstetricia no es la excepción, ya que el embarazo es un estado fisiológico que tiene ciertas características, donde las embarazadas son sujetos de riesgo para algunas enfermedades. Es por ello que se plantea la necesidad de retomar los cambios fisiológicos normales del embarazo, con el fin de identificar oportunamente todos los datos que guíen a la toma de decisiones diagnósticas y terapéuticas, con el fin de minimizar riesgos en la medida de lo posible mediante la participación multidisciplinaria activa. Se espera que este capítulo sea de utilidad y aplicación clínica en la práctica futura para este grupo de pacientes, que constituyen un dolor de cabeza para los obstetras.